Entrega de recursos a albergues escolares indígenas.‏

Un firme llamado a defender y proteger la esperanza, y no permitir que ésta sea arrebatada ni lastimada con actos de violencia, hizo hoy el gobernador Fernando Ortega Bernés.

 “Debemos cuidar la esperanza, por más difíciles que sean los problemas, por más grandes que sean los desafíos que hay que vencer, por más grandes que sean los obstáculos que hay en el camino de una vida; hay que sostener todos los días la confianza en nosotros, la confianza en este gran país, en este gran Estado”, aseveró.

 Al reunirse hoy junto con su esposa Adriana Hernández de Ortega, con jóvenes de los 20 albergues escolares indígenas de la entidad, Ortega Bernés hizo esta tarde una amplia convocatoria a no generar violencia y confiar en que los hechos de injusticia se deben de resolver con justicia no con más conflicto. “En este país tenemos que conservar el valor de saber decidir para resolver nuestros problemas, no para hacerlos más grandes”, indicó.

 El mandatario estatal de manera enfática hizo referencia de nueva cuenta al lamentable suceso ocurrido en Bolonchén de Rejón, donde a causa de la actuación irracional de elementos policíacos perdió la vida el ingeniero Dennis Canché Trejo, y comentó que desde el primer momento en que ocurrió el triste suceso mantuvo comunicación con los familiares, e incluso ayer mismo se reunió con ellos, “porque en Campeche el gobierno da la cara y tiene la responsabilidad, cuando alguien del gobierno se equivoca, de actuar con firmeza y asegurar de que quien viola la ley o comete un delito inaudito, lo pague muy caro”.

 Subrayó que político es quien resuelve problemas, el que disfruta escuchar y convivir con la gente, el que entiende que su patrón es el pueblo, “político es el que resuelve un conflicto, aunque tarde en resolverlo; político no es el que le mete más leña al fuego, político no es el que quiere sacar ventaja de los conflictos, el que enreda más las cosas, político no es el que hace uso de hechos reales de injusticia que pueden ocurrir, para sacar provecho político”.

 “Quien se llame político —agregó— que resuelva problemas, que resuelva conflictos, que se comprometa a defender los intereses de  una comunidad, no los intereses de un partido político o de otros políticos”.

 Remarcó que los hechos de injusticia se tienen que resolver con justicia, no  con más conflicto ni más violencia, “no quemando instituciones que son del pueblo”.