¿Y antes, qué hacía la Seduc? Ricardo Alonso LARA TREJO

(Colegio SAYAN)

Desde el mes de enero del presente año, varios medios de comunicación publicaron que “la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señaló que, con base en estudios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar a nivel internacional con mayores casos de bullying en nivel secundaria”.

Por medio de un comunicado de prensa, la propia comisión indicó que, de acuerdo con la OCDE, poco más del siete por ciento de los estudiantes de secundaria consultados para el estudio, dijeron haber robado o amenazado a alguno de sus compañeros de escuela.

Tal parece que este informe de la CNDH pasó sin pena ni gloria para los responsables de la educación de las entidades de nuestro país. No comprendieron las autoridades educativas la advertencia que emitió la dependencia, que para erradicar el bullying se debe fortalecer una urgente política escolar integral que involucre tanto al personal docente, como a directivos, administradores, padres y madres de familia, así como tutores y estudiantes.

Tanto a nivel nacional como a nivel estatal tuvieron que esperar la muerte de del menor Héctor Alejandro por los golpes que recibió en la cabeza por parte de cuatro compañeros de grupo de su secundaria, ubicada en Ciudad Victoria, capital de Tamaulipas.

Lo más asqueroso de este crimen, fue que la violenta muerte del menor se efectuó ante la mirada pasiva de su maestra Denisse Serna Muñiz que se encontraba al frente de la clase en el momento del incidente y de la subdirectora Sandra Luz Garza, según ha declarado el desafortunado padre de Héctor.

Antes del informe de la CNDH, o antes de la muerte del menor, se vale preguntar: ¿qué había hecho la Secretaría de Educación en el estado de Campeche a través de su departamento de Corresponsabilidad Social para evitar el bullying en las escuelas de eduación básica?

¿Será que este departamento, como muchos otros de la Seduc, sólo sirva para darle cabida a personas recomendadas?

Bueno, esperemos que la puesta en marcha de talleres en donde se supone que hará salir de sus cómodas oficinas a los encargados de Corresponsabilidad Social, abarque las miles de escuelas del estado y que sobre todo, sirvan para abatir los problemas que se viven a diario en los centros educativos, como es el caso del que nos ocupamos en este artículo, el bullying.