Inapam e Indesol, de la mano en favorde los adultos mayores

La suma de esfuerzos entre dos instituciones dio como resultado un aumento de su productividad, en beneficio de los adultos mayores. Esa fue una de las conclusiones a las que llegaron ayer las titulares del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), e Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), Aracely Escalante Jasso y María Angélica Luna Parra, respectivamente.

Por medio de un convenio de colaboración que firmaron, las titulares de los dos institutos, ambos integrantes de la Secretaría de Desarrollo Social, coincidieron en que la labor del Inapam complementa y fortalece la del Indesol y viceversa, pues ambos han explorado dos facetas de un mismo tema, los adultos mayores.

A modo de ejemplo, el Inapam tiene un padrón efectivo de 3,500 clubes de la tercera edad, repartidos en todo el territorio nacional, y su titular ofreció a la del Indesol entregar esa información para que éste trabaje varios de sus programas dirigidos a organizaciones no gubernamentales en esos grupos.

Otro aspecto en el que el Inapam colaborará con el Indesol es la capacitación de los cuidadores de las personas de la tercera edad, pues muchas veces son éstos quienes más resienten las limitaciones de aquellos, sean visuales, auditivas o físicas.

Por tanto, deben capacitarse adecuadamente para el manejo correcto de las personas de la tercera edad, incluso saber cómo cargarlas, asearlas y tratarlas sin que eso comprometa su salud física y mental. Y en este aspecto, el Inapam tiene ya mucha experiencia.

La maestra Luna Parra, por su parte, ofreció al Inapam toda su experiencia en la conformación de grupos formados para realizar actividades productivas y entre ellos, los de adultos mayores, quienes son verdaderos casos de éxito por su dedicación y perseverancia en los proyectos que emprenden.

Explicó que muchos de esos adultos han derribado el mito consistente en que durante la tercera edad ya no se puede ser productivo. Todo lo contrario, expuso. Es en esa edad en la que más experiencia, empeño, cuidado y amor se pone en cada proyecto para hacer que prospere.

–No son sólo casos de éxito, sino de verdadero amor por la vida y una razón más para vivir, sobre todo en adultos mayores –señaló.

Por medio de un video expuso el caso de un grupo de adultos mayores radicados en el barrio de Tepito, quienes luego del terremoto de 1985 se organizaron para iniciar un programa de vivienda que les permitiera recuperar lo que habían perdido a causa de ese desastre.