domingo, 1 de septiembre de 2013

LICANTROPIA. ( Frank Barrios Gómez. )



No acepta la ciencia oficial que un humano pueda transformarse en animal. La lógica no lo acepta y aún más, si no ha sido visto por ojos humanos que lo atestigüen. Y si fuera el caso, ¿quién va a creerlo?
En los años 80, vivía yo en Ciudad Obregón, Sonora. Tuve un huésped italiano, de nombre Patricio, estudiante del conocimiento gnóstico, el cual había iniciado en su tierra natal, Italia.
Cierto día, surgió durante una plática el tema de los licántropos. Dijo Patricio: “En Europa, para nosotros la existencia del hombre lobo es una realidad, como sucede en México con los nahuales. Ciertas personas pueden transformarse en lobos, los han cazado y el animal, al huir herido, los cazadores siguen sus huellas encontrando al final en lugar de una bestia a un humano herido o muerto”.
Dentro de la cultura chamánica, el lobo siempre ha sido un mítico animal de poder. Otorga su fuerza a quien sepa valerse de ella, y le protege en caso de peligro, como también concede su fuerza y astucia a quien escoja como un protegido.
Mediante viajes al subconsciente, los chamanes acostumbran dar a beber pócimas alucinógenas, a quien solicita su ayuda para reencontrarse consigo mismo. Durante esa travesía, quien está viviendo esa experiencia suele encontrarse con el mítico animal que le protegerá durante toda su vida, y le dará su fuerza para que alcance sus objetivos.
Carlos Castaneda, en varios de sus libros relata cómo el brujo yaqui, Juan Matus le toma como alumno y mediante la toma de alucinógenos, le enseña cómo convertirse en animal. Así logra transformarse en cuervo, realizando el viaje a los mundos de poder. Al terminar su travesía, se siente atraído hacia la tierra. Al volver en sí, se encuentra desnudo y en otro sitio distante al que inició el vuelo. Ahí le encuentra su maestro, don Juan, quien le recrimina cuando Carlos le pregunta si lo que vivió fue un sueño o una realidad.
El transformarse en animal, es algo que sólo alcanza a comprender quien tiene ese poder. En algunos casos se da por herencia, ya que la familia es nahual, y desde el instante del nacimiento del nuevo miembro, conocen la técnica para descubrir cuál es el animal que protegerá al recién nacido, además de darle todo su poder para que pueda transformarse en lo que le acompañará de por vida.(SI DESEA EL ARTÍCULO COMPLETO, SOLICITARLO A: laratrejo@hotmail.com)

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