sábado, 23 de agosto de 2014

LA RELIGION BUDISTA. Por Frank Barrios Gómez.



La vida del sendero espiritual es muy extensa. Estamos más familiarizados con nuestra cultura occidental, donde la religión impuesta por los conquistadores españoles es el catolicismo. Monjes, Curas, obispos, arzobispos, cardenales y El Papa, son los nombres comunmente escuchados, dentro de la Iglesia Católica con sede en Roma.
Cada cultura tiene su propia religión, y en cada una de ellas encontramos cosas hermosas. Buscan la salvación del alma, mediante un conocimiento que erradique la ignorancia. Eso es lo que usualmente pregonan, y los fieles siguen esas enseñanzas.
Diseminadas en todo el mundo, encontramos miles de religiones y escuelas filosóficas. Cada una de ellas posee parte de una verdad relativa, la cual es una guía para que el buscador de lo espiritual, tenga una base para guiarse.
La religión nació para unir. Por eso su traducción del religare, significa unir. Las iglesias se formaron para unir, aunque en la vida práctica se ve todo lo contrario. Cada quien jala agua para su molino y ataca al credo opuesto, como si entre lo divinal existen separaciones.
Acaso entre las naciones, se acostumbra ver con malos ojos al vecino de otra país, por el sólo hecho de no haber nacido en la misma tierra. Es hermoso cuando se aprecia la comunión entre parejas, de diferentes nacionalidades, ya sea de amigos o matrimonios. Aquí se está llevando a cabo el verdadero religare (unión).
El problema de los diversos credos, es que al estar dirigidos por seres humanos, cada quien ve de acuerdo a su conveniencia, e impone a los feligreses los principios religiosos que profesa, llevando a cabo imposiciones para quienes quieran seguir dentro de sus filas. Por eso, siempre he dicho que el significado de iglesia es: “conjunto de normas establecidas, para satisfacer intereses mezquinos del clero”.
Todas las religiones son perlas preciosas engarzadas en el hilo de oro de la divinidad. Ninguna resulta superior a otra, y si existen varias, es porque el Creador así lo permite, para que cada quien de acuerdo a sus usos y costumbres, se acomode en la que mejor se sienta. (SI DESEA EL ARTÍCULO COMPLETO, SOLICITARLO A: laratrejo@hotmail.com)

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