sábado, 20 de abril de 2013

EL LENGUAJE CORPORAL. Frank Barrios Gómez.


a forma en que muchas personas enfocan el ritmo de su vida no es el idóneo. La vida pasa demasiado rápido, y cuando se quiere detener el tiempo para disfrutar eventos o corregir errores, no es posible porque lo pasado quedó escrito, manifestándose en el cuerpo el cual cargará con esa huella.
Los excesos son dañinos en todos los casos. El joven impetuoso, cree que toda su vida gozará de vitalidad, dedicándose a los vicios sin medir las consecuencias. Tarde o temprano llegará la enfermedad, y en muchos de los casos acompañada de dolor, reduciendo la calidad de vida, lo cual no permite gozar como  se quisiera.
Aun así, poca es la gente consciente de que el despilfarro energético será lo que ocasione una vejez prematura. El cuerpo es algo que no puede reemplazarse y hay que cuidarlo, darle su mantenimiento tanto físico, mental y espiritual, para que exista un verdadero equilibrio, que permita gozar al máximo y llegado el momento, dejar una huella grata sobre lo hecho en vida.
Quien se quiera a sí mismo tendrá sensibilidad para querer a quienes estén a su alrededor. El cuerpo emite señales cuando algo no marcha bien, y vale la pena hacer un alto para entrar en comunicación con él, detectar lo que está por fallar y corregir esa anomalía.
Pero casi nadie lo hace de esta manera. Quieren depositar su salud en manos del médico, quien en muchos de los casos no puede hacer nada, porque cuando la máquina humana llega a sus manos, está tan deteriorada que su compostura resultaría un milagro.(SI TE INTERESA EL TEMA, SOLICÍTALA Y TE LA ENVIARÉ COMPLETA. laratrejo@hotmail.com)

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