El cuerpo tiene su propio lenguaje corporal, no necesitando sonido alguno para expresar su estado de ánimo. ¿Por qué en ocasiones se pierde la calma y tanto, movimientos como sonidos se tornan bruscos?
Sencillamente esto sucede cuando se llega a perder la paciencia, se olvida de la tolerancia o se quiere imponer una decisión, y la contraparte no está dispuesta a dejarse someter.
Entre gente cuerda, lo recomendable sería no perder la paciencia, volverse tolerante ante el violento, ya que el fuego no se combate con fuego, y de seguir ese juego, lo que sucederá es verse involucrado en una serie de acontecimientos, cuyo desenlace a nada bueno conduce.
Quien no pierda la paciencia, sencillamente hará notar su inconformidad, diciendo no estar de acuerdo con esa decisión, y con una sonrisa de dominio sobre sí mismo (que es lo que muchos no tienen), da la espalda dejando al bravucón con su enojo, y su estado anímico exaltado.
Reza un refrán que quien se enoja pierde, también quien cae en ese estado de ánimo tiene 2 problemas, haberse enojado y tendrá que ver cómo contentarse. Además de correr el riesgo de aguarse el día o el evento en el que se encuentra. Quien se descuide, será arrastrado por este torbellino de sentimientos encontrados.
¿Por qué se manifiesta el enojo entre 2 personas? Muchas respuestas pueden darse, y no es el caso lavarse las manos buscando una justificación. Cada quien tendrá su propia verdad y razón, siendo respetadas en todos los casos. Tampoco es válido buscar un chivo expiatorio para cargarle las culpas, porque cada quien debe ser responsable de sus propias acciones.
Se enojan 2 personas, cuando una de ellas entra en el juego de la otra y cuando se da cuenta, se encuentra atrapado dentro de la telaraña que sutilmente se tejió a su alrededor, y en muchos de los casos no es posible escaparse de algo en lo que queriendo o no, como se dice vulgarmente, se está dentro de la olla.(SI DESEA EL ARTÍCULO COMPLETO, SOLICITARLO A: laratrejo@hotmail.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario