POLÍTICA, REMEDIO CONTRA LA VIOLENCIA (CEN del PRI)

Un país dispuesto a aprovechar sus enormes recursos humanos y naturales, para dar un paso definitivo hacia el pleno desarrollo, que en el mediano y largo plazos luce próspero, vislumbra en México la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), merced a las reformas constitucionales aprobadas, y las legislativas que ahora mismo se analizan, encabezado por un gobierno que personifica el “mexican moment”; un territorio que va recuperando la paz y la certidumbre en extensas zonas del país, replegando la violencia a lugares muy puntuales de la geografía, en los que -tenemos que reconocerlo- la descomposición social, la zozobra y la inseguridad se han profundizado hasta generar las alarmantes imágenes que hoy se publican.

Es la política, la primera y más importante herramienta que tenemos para entender y acometer las dos “realidades” que forman nuestra realidad. México enfrenta el reto de continuar con renovado vigor la tendencia reformista y terminar por cambiar el andamiaje jurídico, que muy pronto nos permita transformar la vida de la gente, beneficiándola y aumentando sus oportunidades de desarrollo; pero encara, también, el enorme desafío de restablecer el tejido social que ahora se desagarra por el enfrentamiento de grupos delincuenciales que demuestran su poder de destrucción en tiempo real, y con equipo y tácticas de tipo militar, se disputan puntos muy concretos del territorio del michoacano.

Dialogando, planteando claramente los propósitos que se persiguen, dispuestos a construir una solución conjunta orientada por los mismos fines, incluso adecuando estos últimos, cuando al hacerlo se puede ayudar más o de mejor manera al mayor número de personas; es decir, pactando, todas las fuerzas políticas podremos construir con las instituciones del gobierno encabezadas por el Secretario de Gobernación, las mejores alternativas para el país. Senadores y diputados ya trabajan en ello, y el PRI está listo para complementar el trabajo político que pudiera respaldar las mejores acciones.

Política de altura, esperan y merecen también los ciudadanos, particularmente quienes viven en los municipios del sur de Michoacán, de parte de todos los actores políticos, a quienes quieren ver unidos en la adversidad, y todos juntos cerrando filas en torno a las instituciones, diseñando e implementando inteligente y coordinadamente una respuesta y una política de Estado debidamente instrumentada.

También así se hace política, unificando voluntades y logrando que éstas brinden fuerza a las instituciones públicas, tanto a las que habrán de impulsar el desarrollo nacional, como a las que están obligadas a recuperar la seguridad, la justicia y la paz en Michoacán.